De todos los microrelatos que he ido haciendo desde hace algo más de un año, este para mí es el relato. Con el mismo he acudido a cuatro concursos. En todos con distinto número de palabras -desde 100 a 300- y con ligeras variaciones en la forma. Por ejemplo cuando en el 2009 participó en un concurso por celebrarse el Año Internacional de la Astronomía aparecía en el mismo una frase tal como “Más vale ser estrella fugaz pero distinta y feliz, que vivir eternamente siendo estrella normal pero desgraciado”.
Con ocasión de que se convocase el concurso de microrelatos CAMPER CITY TELLING, presenté al mismo cuatro de los que tenía archivados de otras ocasiones. Era tentadora la propuesta que me llegaba por medio de Maribel.
Cuenta tu historia, escribe tu ciudad
Prepárate para un concurso literario único: cálzate tus Camper, sal a la calle, camina y encuentra las historias de tu ciudad, sus senderos secretos, sus barrios eclécticos.
Puedes escribir en italiano, alemán, inglés, francés o español.
Caminar puede ser una experiencia mágica: bajo un hechizo, miras lo que te rodea con ojos nuevos e imaginas, descubres y creas tu propio mundo, paso a paso, historia tras historia.
Pasea por las calles de tu ciudad y encuentra nuevos caminos, callejones, lugares que no conocías o que hasta entonces no habías visto de esa forma. Un viajero nunca tiene prisa, nunca se preocupa por los callejones sin salida, prefiere encontrar nuevos caminos al margen de los mapas: el viajero descubre la ciudad real.
Tienes una ciudad sobre la que hablar, miles de calles que mostrar, tu propia forma de escribir. Historias urbanas que compartir desde tu experiencia. Tu punto de vista es único, así que cuenta tu historia, escribe tu ciudad.
Ha sido en esta ocasión cuando por fin “CAMBIO DE RUMBO”, uno de mis favoritos, ha sido admitido en el apartado de Secretos. Y realmente puedo decir, testigos hay de ello, que hasta esta fecha realmente ha estado a buen recaudo en una caja de secretos.
CAMBIO DE RUMBO
Era una mañana estival, sentado frente a un riachuelo estaba reflexionando sobre hacia dónde dirigir el rumbo de su vida.
Sus padres siempre habían pensado que era como una bala perdida, sin embargo él era consciente de que lo que les había separado era una cuestión de sentimientos. Lo que él sentía y lo que le proporcionaba felicidad, era considerado por sus padres como algo fuera de la ley.
Tras mucho meditar decidió que su vida debía seguir el rumbo marcado por la naturaleza, al igual que lo hacía el riachuelo testigo de sus desazones.
Decidido se dirigió a la casa paterna y con gran diligencia les dijo:
-Llevo mucho tiempo intentando normalizar mi vida y no lo he conseguido porque os cuesta aceptarme como soy. Tras meditarlo seriamente he decidido casarme, será el mes que viene. Mamá me gustaría que fueras la madrina de mi boda con Ramón.
Las propuestas de Maribel son siempre tentadoras, al igual que las tuyas. Son como el río de tu micro. Todo el mundo debería escuchar a su corazón y darle un cambio de rumbo a su vida.
ResponderEliminarMe encanta ese golpe de efecto final, donde en vez de Elvira o Juana se lee Ramón.
Felicidades por haber sido seleccionada. Ahora a ganar.
Un abrazo.
Buen micro, Alicia, y banda sonora muy adecuada.
ResponderEliminarCon el tiempo el desenlace -esperemos- dejará de ser impactante.
Un besazo.
Sí creo recordar el micro en alguna de sus versiones anteriores. Reflexiones, desencuentros, decisiones finales. Está muy bien.
ResponderEliminarYo he participado en Camper con un texto.
Te deseo suerte (creo que se falla el 15 de junio).
Un abrazo.
A ver si ganas, Alicia, está muy bien escrito. También estoy de acuerdo con Aster en que, con el tiempo, el desenlace dejará de ser impactante. Recuerdo un relato de Jose Antonio, también con elementos sobre el tema. Reconozco que es un relato necesario para una parte de la Humanidad. Estamos llenos de prejuicios.
ResponderEliminarYo no he vivido esta situación, pero si otras, como la del racismo, con personas conocidas. Detrás de todo esto siempre hay dos cuestiones básicas: la libertad y la integración social. Creo recordar que, fuera ya del relato, me cuestioné, en algún comentario, el tema de los "simbolos establecidos", como el de las bodas, el matrimonio. Pero eso nos llevaría a un debate, je, je...que ya sabes que son mi debilidad y no es el caso. Ojalá tengas suerte, Alicia. Te lo deseo de todo corazón.
Ramón...tantas veces vestido y desvestido, compañero de tertulias y de café. Por fin se presenta ante nosotros, con el traje de los domingos, para dejar su huella en nuestra Nieve.
ResponderEliminarEnhorabuena Alicia, espero que tengas suerte y añadas al fondo de armario de Ramón unas buenas botas de monte...Camper.
Bihotzez.
Jose Antonio, a veces la velocidad del rio y la costumbre de su cauce ha llegado a arrastrar a seres anónimos, como el de mi relato, haciendo que el miedo y la impotencia se apoderen de ellos. En el camino, también les ha golpeado algún que otro canto rodado que les ha dejado huellas dificil de borrar. En esas condiciones adversas bastante han tenido con no ahogarse.
ResponderEliminarJose Antonio, yo ya he ganado. Me resistía a que este micro pasase sin pena ni gloria. Al menos ya es un micro nominado.
Besos
Aster, me has sorprendido. Esperaba que fuese Emilio el que se fijase en la película y en su banda sonora-oscar a la mejor canción en el 1993-. Philladelfia es un drama dónde inicialmente parece tratar el problema de un joven con sida- Tom Hanks, oscar al mejor actor- cuando en realidad, el virus simplemente es una excusa para plantear el problema de la discriminación a los homosexuales.
ResponderEliminarAster, creo que el tiempo se está demorando demasiado. Desde las aulas tengo la impresión de que son los más jóvenes los menos tolerantes ante las diversas opciones sexuales.
Un besazo
Maribel, gracias por la propuesta. Me alegro que al final tú también hayas participado. Si voy sola siento que el viaje tiene menos sentido.
ResponderEliminarYa nos enteraremos del dictamen. Con la crisis no nos vendría mal un par de botas Camper y el viaje a una de las fábricas para tener vacaciones gratis.
Besos
Efectivamente Emilio, uno de los relatos preferidos de Jose Antonio, de su libro EL MIRADOR, tiene por título “Salir del armario”. Ahora que es una salida menos traumática por ser la de un escritor.
ResponderEliminarYo desde las aulas sigo viviendo de vez en cuando el rechazo hacia los distintos. Los adolescentes a veces no son conscientes de lo crueles que pueden llegar a ser.
Con respecto a los símbolos a los que te refieres, como el matrimonio, creo que no tienen nada más que la trascendencia que uno quiera dar. A veces uno los utiliza por costumbre, por creencias, por no ir contracorriente o por tener atadas cuestiones legales… En el caso del matrimonio, creo que el amor está por encima de cualquiera de esas razones. Uno no se casa por amor. Como ama, busca dar los que cree que son los mejores caminos a ese amor para que se deslice por ellos. Vamos que casi me meto en el debate.
No te voy a engañar. Sé que es muy difícil pero me gustaría que fuera el relato ganador por contribuir con un granito de arena a normalizar la homosexualidad. Sólo hay una vida y ellos la tienen que vivir también plenamente sin tener que esconderse.
Besos
Mari Carmen, tú sí que sabías que este era mi micro preferido. Acaso por qué en mi camino me he encontrado con Oscar, Sergio, Txema, Gontzal... En veintitantos años habido muchos armarios cerrados en las aulas. Sabes cómo he sufrido por el sufrimiento de cada uno de ellos. Lo que Emilio ha citado como ausencia de libertad o integración social, bien se pudiese definir también como intolerancia y no aceptación de la diversidad.
ResponderEliminarDe Oscar sé que es técnico asesor del Gobierno Vasco y vive ya con su pareja a quién tengo el gusto de conocer. De Gontzal sé que por fin su padre aceptó la condición sexual de su hijo único. Fue el precio por no perderle. Con Sergio me encontré el otro día en el metro. Todavía no ha acabado la carrera. No salió el tema, la normalidad hizo que el viaje se nos hiciera corto… Por cierto que Xenia y Garazi acabaron, respectivamente, sicología y medicina y siguen juntas…Son ahora vidas plenas pero con pasados caminos tortuosos. Espero no recordar a más alumnos por esta razón.
Mari Carmen, ya es suerte haberlo sacado de la caja de los secretos, pero si pillamos las botas miel sobre hojuelas.
Besarkadatxu bat
Alicia y Emilio,
ResponderEliminarMe habéis tocado al acordaros de mi viejo cuento.
Opino que salidas del armario hay muchas e inesperadas.
Ahora mismo, tengo un alumno en la academia al que le han colgado el cartel de "chico malo" en el colegio. Le llamo Damian (por La profecía). Va a 3º de primaria. Alucino cuando veo su agenda plagada de quejas en rojo dirigidas a la madre. Si alguno de sus profesores dejara de escribir y le hiciera un poquito de caso... Conmigo, aunque ha habido que domarlo, se porta como Dios. ¿Acaso no le damos la oportunidad de reinsertarse a los delincuentes? ¿Por qué no dársela a un niño que aún no ha delinquido?
Un abrazo.
Jose Antonio, hay un final de una fábula que dice “Al nuevo árbol se le endereza tierno para que crezca derecho” y tú y yo como educadores bien sabemos que es así.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo. Creo que lo que está pasando en parte de la sociedad es que se están olvidando aquello de que para educar a un niño hace falta toda la tribu y hoy en día muchos padres y educadores no invierten tiempo de calidad.
Un abrazo.