Cola del súper. La señora que tengo delante descarga su compra sobre la cinta.
Rodeado por una caja de leche desnatada, el papel higiénico y dos tetrabriks de vino Don Simón, asoma La tumba del tiempo, el libro que me ha hecho millonario.
La mujer paga la cuenta y lo arroja en la misma bolsa en que lleva el Mistol.
Ejercicios de agudeza visual
Aster, qué bueno.
ResponderEliminarCon tu breve literatura siempre nos incitas a dar un paso hacia adelante, bien mediante una reflexión y/o un proceso de investigación.
Primeramente, lección teórica, ¿De qué va eso del Hot-linking? Bueno pues a pesar de que era una materia de alto nivel, lo he entendido. Con el trabajo añadido de que soy de francés y todos los nuevos términos informáticos los tomamos prestados del inglés. Cuando he vuelto con la lección aprendida y la reflexión hecha, constato que te has apiadado de nosotr@s y has decidido cambiar los contenidos mínimos de la entrada. No me resisto, me gustan los retos ja,ja,ja. Me ha encantado el paralelismo inicial entre la cinta transportadora de la caja del supermercado y el ancho de banda del sitio web de la persona a la que le están efectuando esa maniobra fraudulenta. Y como consecuencia, también el correspondiente paralelismo del coste accesorio para el propietario de la red, al que le hacen esa estafa etiquetada como Hot-linking, con la carga del precio del libro que le hacen a la compradora.
Compañero, cuánto expresas en tan poco.
Un abrazo.
Gracias, Alicia.
EliminarNo hubo nada intencionado detrás de ese hotlink: blogger te da la opción de subir imágnes a los posts copiando simplemente su URL. Es cómodo pero peligroso porque si el sitio del que lo tomas tiene muy claros los derechos de autor y está pagando un dominio, en lugar de la imegen que has subido, acabas mostrando en tu entrada publicidad o algo peor.
Procuro siempre descagar la imagen y mencionar su crédito pero en algunas ocasiones escojo ese otro camino. Os pido disculpas.
Un besazo.
Aster, estoy encantada por haber aprendido algo que acaso ni sabíamos que existía-yo al menos no lo sabía-Yo me retroalimento. Si os confundí a tod@s asumo yo la culpa ja,ja,ja.
EliminarTambién resulta curioso el recurso de los autores que pagan el dominio usando un tipo especial de archivos para remplazar las imágenes likadas por otras que a veces pueden ser de caracter ofensivo.
En el siguiente enlace hay información más detallada.
http://www.elmosquitero.com/2009/02/que-es-el-hotlinking.html
Un abrazo.
A mí me gusta especialmente que pongas la literatura como artículo de primera necesidad y que desmitifiques la fama y el éxito, tan priorizados en nuestra sociedad. Felicidades, Aster.
ResponderEliminarUn abrazo.
Esa es la lectura que yo también hago, José Antonio.
EliminarTambién puede haber otra: ¡Qué mala es la envidia!... ¿No sería este mi sueño como escritor, el sueño de un escritor: hacerse tan imprescindible como esos artículos?
Una tercera: tan elemental, tan vulgar, tan ordinario como esos productos.
En fin.
La verdad es que el comentario de Alicia me desconcertó un poco y pensé que había algo en ese "ejercicio de agudeza visual" que yo no veía.
ResponderEliminarCoincido con tus apreciaciones, Aster.
Un abrazo.
Aster, has tocado el punto. Las vanidades están en los estantes. La paradoja siempre la paradoja.
ResponderEliminarUn abrazo marca libre.
Sergio Astorga