La frase de inicio de los microrrelatos presentados a concurso, cuya extensión no podía sobrepasar las ciento cincuenta palabras, fue “El comandante de la Guardia Suiza nunca llegó a cruzar el umbral”. El Jurado de la tercera edición del Concurso de Microrrelatos ‘Getafe Negro’, estuvo formado por el director del festival, Lorenzo Silva, y el director de Escuela de Escritores, Javier Sagarna, actuando Germán Solís como secretario sin voz ni voto. No tuvieron fácil la elección pues el número de autores participantes fue de 1228.
s dejo el micro con el que participé. Por primera vez me basé en un acontecimiento real histórico.
CÍRCULO CONCÉNTRICO
El comandante de la Guardia Suiza nunca llegó a cruzar el umbral de la madurez. El ciclo de su vida se cerró en los escalones del altar mayor de la basílica de San Pedro. Maestro en el uso de la alabarda, la pica y la lanza, sucumbió en aquel desigual enfrentamiento. La impotencia, coloreada de rojo, fluyo a borbotones a través de la fisura de su armadura. El terror de la sangría quedó marcado en su yerto y desencajado rostro. Fueron pocos para hacer frente a la tropa de soldados alemanes y españoles al mando del emperador Carlos V. Aquel 6 de mayo de 1527, su cuerpo formó parte del círculo humano que protegió a Clemente VII. Con tal heroico y leal acto, el Papa consiguió huir por un pasaje que le condujo al castillo de Sant´Angelo. En un mismo círculo concéntrico, la vida y la muerte de la mano.
Querida Alicia, este relato tuyo debió traspapelarse entre los más de mil doscientos trabajos presentados. Seguro que no lo leyeron; de haberlo hecho, le habrían concedido el máximo galardón. Ellos se lo pierden. No dejes de escribir.
ResponderEliminarBesos.
Alex
Alex, la verdad es que a mí me gustó por lo que supuso de pequeña investigación. Imposible leerlos todos pero te aseguro que hubo calidad. Me gusta ver que se les ocurre a otros compañeros con las mismas claves y te aseguro que nunca me defraudan. Con ello ya obtengo mi premio. No se equivocó quien dijo "la imaginación al poder". Bueno creo que me he liado y quería hablarte del poder de la imaginación ja,ja,ja.
ResponderEliminarGracias por acompañarnos.
Un abrazo.
Excelente micro, Alicia, y en un registro -el histórico- en el que te estrenas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me encanta este micro, Alicia, me parece muy bueno. Como dice Alejandro, seguro que no lo leyeron.
ResponderEliminarFelicidades y un abrazo.
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ResponderEliminarAster, decidí investigar un poco sobre las competencias y curiosidades de la Guardia Suiza a lo largo de la historia, por lo de ir documentándome y encontré al posible protagonista del mismo. Los de otros micros tuvieron mejores aventuras y destino.
ResponderEliminarUn abrazo
Maribel, a mi también me gusto el cambio de registro. Es un placer poderlo compartir con todos vosotros y que además os parezca que quedó curioso.
ResponderEliminarUn abrazo.
Cómo que quedó curioso, Alicia...Es genial.
ResponderEliminarMe gusta mucho y me alegro de que te hayas adentrado en un nuevo registro, el histórico. Ampliando y creciendo, en conocimientos, en escritura...Enhorabuena.
Besos y un fuerte abrazo.
Excelente micro, histórico, tal vez el más dificil para condensar en pocas palabras una historia completa sin que suene a resumen. Te desmarcaste.
ResponderEliminarMe ha gustado tu espacio, me verás por aquí.
Un saludo desde entre montones de libros
Mari Carmen, en el poco tiempo del que dispongo últimamente para la Literatura, evolucionando, experimentando y disfrutando. Me alegro mucho que te haya gustado.
ResponderEliminarMusuak.
Gracias por comentar.
ResponderEliminarUn saludo hasta ese montón de libros.
Los concursos son ese círculo concéntrico que se cierra en torno a los de siempre, pero tú siempre te superas en ilusión y originalidad. Una experta en manejar el teclado, vaya. Inasequible al desaliento como el protagonista de tu micro.
ResponderEliminarEres un gran ejemplo para todos.
Un abrazo.
La vida es cuestión de círculos. Círculos humanos los que delimitan la Historia, los que convergen en ella. No conocía el dato y parece verdad. Un Papá salvado por uno de sus soldados. Esa misión de la guardia suiza, proteger al Papa, no cabe duda de que, en otros tiempos, era algo más que simbólica. Muy interesante relato, Alicia. Nunca creí que un Emperador Católico, como Carlos V, fuera capaz de querer poner al Sumo Pontífice a buen recaudo. Un abrazo.
ResponderEliminarEfectivamente Emilio, la vida es cuestión de cículos. Como bien sabes, esa vida a veces la realizamos dentro de una esfera que intentamos llenar con armonía. Cuando la armonía se destruye solemos decir que nos sentimos atrapados entre cuatro paredes, vamos que aparecen los cuadrados y los recovecos de las esquinas.
ResponderEliminarGracias por pasarte.
Abrazos.