El corto, obra de Christine Rabette, está milimétricamente calculado: el espacio, los colores. Es un excelente micro que deja al lector la tarea más importante.
¿Quién es ese personaje? ¿Qué le impulsa a hacer lo que hace? ¿Por qué esa última carcajada tan inquietante? Dadle vueltas a nuestro protagonista porque esconde más de un relato.
La peli ha generado una auténtica flashmob y experiencias similares se han llevado a cabo incluso en el metro de Bilbao. Ya sabéis que el mundo entero, a fin de cuentas es un Bilbao más grande;-)
Está bien eso de ir por la vida contagiando risas, y cuanto más escandalosas mejor, más liberadoras. Yo también me he reído, y en un lunes se agradece especialmente. Merci, Aster.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias, Maribel. Un abrazo
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ResponderEliminarMe he gustado mucho y lo que me he podido reír… La risa comunica, libera, acerca… libera tensiones. Sí, no está mal para un lunes de invierno :-) Gracias, Aster. Sobre lo del personaje, dame tiempo. Me parece una propuesta muy interesante.
Besos y abrazos.
Gracias, Mari Carmen. El personaje está lleno de posibilidades.
EliminarAster, acaso la risa sea la mejor de las cosas que se puedan contagiar. Estoy recuperándome de un cantagio menos divertido, ya sabes, la famosa gripe que nos está atacando por todos los flancos.
ResponderEliminarRespecto al personaje, cuando vaya en el metro le iré dando vueltas.
Un abrazo.
Gracias Alicia. Paracetamol y sonrisas, compañera.
EliminarUn abrazo
Lo primero que he pensado es que el personaje misterioso ha aprovechado para robar a los pasajeros... algo más que la angustia existencial. Pero luego he pensado: igual es un loco que se ha escapado de un psiquiátrico. Y finalmente me he dicho: por qué todo se reduce a un porqué. Es lo maravilloso de la risa, que no tiene razón de ser.
ResponderEliminarUn abrazo.
La mejor versión, con diferencia, es la última, José Antonio.
EliminarUn abrazo.